Los servicios de beneficencia durante la posguerra eran realizados por “Auxilio Social”, entre sus prestaciones se encontraba la gestión de diversos comedores distribuidos en nuestro municipio. El siguiente testimonio nos relata una divertida anécdota en el comedor social de la Torrealta.
JMV, nacida el 16 de noviembre de 1936 en Molina de Segura. Siendo muy pequeña, junto a su familia, se trasladó a vivir al Cabezo de Los Lunas de la Torrealta.
La Torrealta estaba jodida de comestibles.
Lo que pasa es que nosotros teníamos aquí mucha huerta, mi papá plantaba patatas, habichuelas, plantaba de todo.
Yo he conocido un rancho que estaba detrás de la iglesia de la Torrealta, era de El Cano, era de los padres de la que lleva el estanco de la Torrealta; eso era de ellos, lo que pasa es que lo dejaron para que repartieran allí; para toda la gente de la Torrealta, que quisiera ir a por un plato de arroz y alubias, un potage de acelgas, lo que sea..potage de cebolla, alubias… para los pobres que iban, al hogar.
Un día le dije a mis hermanos, que eran pequeños -vamos a que nos den algo, a ver cómo guisan allí-.
Y decía mi madre -pues arroz y alubias, como aquí, cosas como aquí se hacen-.
Nos empeñamos en ir, estuvimos una hora en la cola y cuando ya íbamos a llegar nos dijeron: -no vosotros iros para atrás, esto es para otros- , y luego no echan dos…, caldo y dos pellejos de alubias. Y dice mi mamá -está bien por haberse ido, haberse estado aquí, en la casa-.